Cantos Sureños

Salida en vuelo con destino Nueva York la ciudad cosmopolita por excelencia del mundo. Llegada y traslado al hotel.

Día libre recomendamos visitar Manhattan.

Traslado a la oficina de recogida del coche de alquiler para salida hacia Philadelphia. Podremos visitar: el camino de Elfreth, el antiguo barrio victoriano, el boulevard Benjamín Franklin con parada frente al Museo de Arte y la Campana de la Libertad.

Esta mañana recomendamos seguir disfrutando de Philadelphia antes de partir hacia Washington D.C. El “Distrito”, como lo llaman los lugareños, se centra en la ciudad capital y luego se extiende a una variedad de vecindarios. Incluye el centro, con sus galerías de arte y vida nocturna, y Dupont Circle, con clubes y tiendas de moda. Capitol Hill y el National Mall cuentan con la mayoría de los edificios y museos más destacados de la ciudad, incluidos los majestuosos monumentos presidenciales y la mayoría de las sucursales de la mundialmente famosa Smithsonian Institution.

Día libre para explorar los sitios más famosos de la ciudad, incluido el Edificio del Capitolio, la Casa Blanca, el Monumento a Jefferson y el Monumento a Washington. Otros puntos de interés son el Cementerio Nacional de Arlington, la Biblioteca del Congreso, la Catedral Nacional y el Zoológico. Por supuesto, hay más en Washington que visitas históricas. Washington también ha desarrollado una activa vida nocturna. Además de los restaurantes de clase mundial, puede ver espectáculos de Broadway, sátiras políticas exclusivas de Washington y música en vivo de todo tipo.

Salida hacia Roanoke. En ruta, recomendamos visitar Williamsburg, el museo de historia viva más grande del país con unos 500 edificios, casas, tiendas y tabernas reconstruidas y restauradas a su apariencia del siglo XVIII. Las atracciones son el Palacio del Gobernador, el Capitolio, el Museo de Artes Decorativas DeWitt Wallace, el Museo de Arte Popular Abby Aldrich Rockefeller y el Bassett Hall. Por supuesto, un viaje a Williamsburg no estaría completo sin visitar Jamestown, el lugar de nacimiento de Estados Unidos, y Yorktown, donde nació la Independencia de Estados Unidos. Este trío, ha llegado a ser conocido como "Triángulo histórico de Estados Unidos". Continúa hacia Roanoke. Esta ciudad en realidad se remonta al siglo XVII, cuando los pioneros se trasladaron al oeste a través de Virginia y se establecieron en el Valle de Shenandoah a orillas del río Roanoke. Como resultado de los depósitos de sal en el área, este asentamiento recibió el nombre de "Big Lick". Visitaremos la popular Market Square, donde encontraremos excelentes restaurantes, vida nocturna y tiendas, así como el histórico Farmer 's Market.

Salida hacia Asheville. Mientras conduces, observaras que estás rodeado de la belleza natural de las montañas Great Smoky y Blue. Asheville es un destino acogedor con joyas arquitectónicas de varias épocas y una animada escena cultural. Recomendamos visitar Biltmore Estate, el castillo de estilo renacentista francés de 250 habitaciones construido por George Washington. Podremos disfrutar de una colección de arte, 16 hectáreas de jardines y una bodega o realizar una excursión en tren al atardecer a través de las montañas Blue Ridge.

Salida hacia la ciudad sureña de Charleston. Charleston es un lugar atractivo para visitar, su distrito histórico está bordeado de casas altas y estrechas de estuco multicolor, adornadas con contraventanas de madera y balcones de hierro, forjado por esclavos de Barbados. La sensación caribeña se ve reforzada por las palmeras, un clima tropical y una atmósfera relajada, mientras que los bonitos jardines ocultos y los frondosos patios de la ciudad evocan a Nueva Orleans. Una forma fantástica de ver esta ciudad es en un carruaje tirado por caballos. Disfruta el Viejo Sur en la arquitectura y los jardines de las numerosas casas y edificios históricos. Pasa por el centro para visitar el distrito comercial de King Street.

Recomendamos disfrutar de la arquitectura y de los jardines de las numerosas casas y edificios históricos, visitar el distrito comercial de King Street y ver los monumentos de la Guerra Civil en el jardín de Battery.

Dejamos Charleston atrás y dirígete a otra joya del sur, Savannah. Recomendamos explorar la ciudad en tranvía y conocer su fascinante pasado mediante su hermosa arquitectura victoriana, el Museo de Arte Telfair, el parque Forsyth y el paseo Factor's. Para disfrutar de la deliciosa cocina sureña, recomendamos visitar el área de restauración del Waterfront, que está llena de tiendas y restaurantes. Sugerimos conducir a una de las islas de alrededor, como Tybee, para probar los productos locales.

Salida hacia St. Augustine. El histórico St. Augustine es el asentamiento europeo permanente más antiguo de los Estados Unidos. Aquí cobra vida la mezcla de culturas española, inglesa y estadounidense. Entre los muchos puntos de interés se encuentra el Castillo de San Marcos, una fortaleza que servía como defensa exterior de la ciudad siendo la más antigua que queda en los Estados Unidos.

Salida hacia Orlando. Sugerimos una parada en Silver Springs. Este parque temático natural rodea las cabeceras del río Silver, la formación de manantiales naturales más grande del mundo. Da un paseo en un bote con fondo de cristal y observa las criaturas que viven en estas aguas. Finalmente, nos dirigiremos a Orlando, la capital mundial de los parques temáticos.

Día libre para disfrutar del parque temático a tu elección: La joya de la corona, Walt Disney World Resort. Este enorme complejo incluye cuatro parques individuales (Magic Kingdom, EPCOT, Hollywood Studios y Animal Kingdom), además de dos parques acuáticos (Blizzard Beach y Typhoon Lagoon). Por supuesto, no puedes pasar por alto las otras famosas atracciones de la zona, como SeaWorld Orlando y Universal Orlando Resort, lugar en donde se encuentra Wizarding World of Harry Potter.

Deja atrás la magia de Orlando y viaja hacia el sur hasta la soleada Miami Beach, una ciudad internacional, rica en una cultura multiétnica que se refleja en su arquitectura y, sobre todo, en su gastronomía. Deja atrás la magia de Orlando y viaja hacia el sur hasta la soleada Miami Beach, una ciudad internacional, rica en una cultura multiétnica que se refleja en su arquitectura y, sobre todo, en su gastronomía.

Las brisas cálidas, las palmeras que se mecen y el sonido de las olas que llegan a la orilla, actúan como telón de fondo para los edificios de color pastel, Art Decó, que hacen de South Beach de Miami un lugar impresionante y a menudo de una belleza embriagadora. Por la noche, diversos locales nocturnos atienden tanto a la clientela más animada como a la relajada. Podremos considerar también una visita a Bayside Marketplace que ofrece tiendas únicas y entretenimiento al aire libre.

Salida hacia el aeropuerto y devolución del coche de alquiler. Salida en vuelo de regreso a España. Noche a bordo.

Llegada.